top of page

No me quieren en la familia de mi pareja

Una de las más tremendas realidades es la de aceptar que la familia de tu pareja es diferente a la tuya, los usos y costumbres de ambas partes entran en guerra cuando los miembros de la pareja no logran escuchar con empatía y entendimiento las situaciones que se presentan como resultado de esta innegable diferencia.



La diferencia nos asusta, lo nuevo nos asusta y nos amenaza también y en muchas ocasiones cuando eres tú ese miembro nuevo que llega a un clan ya consolidado, es natural que te genere la necesidad de interpretar, sobre-pensar y sobre-vigilar los comportamientos y actitudes que pueden tener hacía ti los otros. Es muy fácil caer en la trampa de tomar todo muy personal sin caer en cuenta que la misma adaptación trae consigo momentos de angustia así como la necesidad de hacer algo al respecto.


En ocasiones el tiempo de convivencia no tiene mucho que ver en este asunto de ser “querida” o no por parte de la familia de la pareja, en este caso, el tiempo es muy relativo.

Si sientes una intensa necesidad de hacer algo al respecto pero temes que se generen conflictos en tu relación de pareja, te comparto algunos puntos a reflexionar y poner sobre la mesa para tomar acciones que te puedan llevar a acomodarte un poco más en la incomodidad que ahora sientes:


  • En algunos casos puede ser sólo una sensación de no caer bien y cuando no hay certeza de que eso sea cien por ciento cierto, recuerda que cada familia tiene una dinámica, expresión y formas muy pero muy diferentes a las nuestras, y que probablemente tu manera de relacionarte y expresarte les genere también ciertas sensaciones. La diferencia hace de las suyas; hablar con tu pareja respecto a lo que sientes, lo que tú te imaginas, el cómo tú estás interpretando las acciones de su familia, siempre será un muy buen paso para sacar el tema y saber lo que tu pareja puede pensar al respecto. Recuerda que lo más importante en este momento es hablar por ti y solamente de lo que tú sientes sin generar juicio alguno sobre las acciones y comportamientos de la familia de tu pareja.


  • Es importante saber que si realmente existe una mala relación entre la familia de tu pareja y tú, es tu pareja quien debería y tiene la responsabilidad principal de intervenir directamente con ellos, es decir, tener esas conversaciones que se necesiten para poner límites y establecer ciertos acuerdos. La empatía y la compasión juegan un papel muy importante en este caso, porque tu pareja carga consigo su propia historia, sus propios conflictos, sus propios traumas así como todo eso que está sin resolver y que tiene que ver con su familia y con él /ella nada más.



  • Si sientes que de plano tu pareja está muy estancada(o) en la situación que le complica establecer los acuerdos indispensables para una convivencia en armonía, es aquí en donde tú puedes entrar en acción desde tu lugar, necesitas ocupar tu lugar. Me refiero a que puedas asumirte en tu lugar dentro de esa familia para que te puedas desenvolver y puedas participar desde un lugar que te permita sentirte cómoda, por ejemplo, si sientes que no te saludan porque crees que te están ignorando puedes ser tú quien tome la iniciativa de ir a saludar cordialmente, recuerda que el objetivo no es crear las mejores amistades o la mejor relación del mundo, sino crear un ambiente respetuoso y amable.


  • Establecer límites está muy permitido y debes saber que hacerlo no es lo mismo que aguantar por ser amable o evitar problemas, si te sientes agredida, si sientes que hay comportamientos demasiados hostiles, que hay groserías hacia tu persona, estás en todo tu derecho de establecer un límite y de tomar las acciones que tú creas necesarias para protegerte a ti y a los tuyos de un ambiente irrespetuoso y agresivo.



Lo más importante que te puedo compartir es que tu pareja y tú son los encargados de establecer y delimitar lo que puede ser y no puede ser permitido en la convivencia familiar, el hecho de poder escucharse mutuamente y en realidad poder ser empáticos para entender lo que uno y el otro necesitan es muy valioso para que entonces se pueda construir una convivencia realmente genuina y honesta entre ambas partes.


Deseo que estas reflexiones y los puntos que te comparto te ayuden a poder crear y transformar las dificultades que naturalmente existen cuando las diferencias se manifiestan en las familias.





Con cariño,

Grecia.




Comments


bottom of page